Me hice caminante
con mis sílabas al alba,
! yo, anduve por allí!
escuchando el alma.
Atravesando vientos
augurios y destinos,
acumule tantos
silencios en la luna
! ella, la que sabe!
quién duerme
quién camina,
cuando el horizonte
se apaga en el ayer.
Entonces la olfateo
blanca como una rosa
sin espinas.
Mentiría si dijera,
que olvide tus huellas,
y cae la lluvia plateada
en el desolado camino,
por dónde un día Volveré.
Claro que volveré
porque siempre regreso,
cuándo se apaga
el horizonte en el ayer.
Sí, con un beso,
sólo un beso
pudiera abrir tú silencio
!allí ! donde me hice caminante.
Guillermina Covarrubias
13/07/2016
No hay comentarios.:
Publicar un comentario