11 nov 2020

*MUCHO MAS QUE PIEL*

 






Sintiendo las viejas zozobras
igual que un río y su rumor
de sueños entre las piedras.
¿Dónde estás fruto del sosiego?
que exhuman los recuerdos
y ponen alas como flechas
en la tinta que me nutre
la carne trémula.
Hacen invisibles madejas
ahogan mis ojos
entre cartas mutiladas
renegando promesas,
en el pensamiento silente;
que acarició la luna
de capricornio
y besó raíces muertas.
¿Dónde estás mi niebla
equivocada?
que mis sílabas
están en desconcierto.


Guillermina Covarrubias Medina




Derechos reservados del autor


21 oct 2020

DESDOBLADA



La jaula se ha vuelto pájaro y se ha volado y mi corazón está loco
Alejandra Pizarnik




Me tragan las sombras
que besan mi noche
desdoblando anhelos;
y al gotear las estrellas
tu nombre picotea
en el terco silencio.
Tan invisible como el aire
y tan cierto que te quiero.
Y ya no quiero quererte
silencio de mi silencio.
Y diseño caminos
pisoteando los días
amasando tu imagen
abreviando la ausencia.
El tiempo arranca
colgando sus horas
y el silencio trepa
arañando las esquinas.
Entonces -Alejandra
me dice: ¡estamos locas!
*deja que la jaula
se vuelva pájaro*, ¡vuela!
mientras en mi rincón...
bebemos el quinto café.

Guillermina Covarrubias Medina
Octubre 2020

5 oct 2020

OTRO DÍA Y NO ESTAS







En la garganta de la noche
galopas salvaje,
desclavas los remotos sueños
en mis horas desnudas ;
sentadas en el silencio de agosto.
¡Ay gota que lloras en el cristal
la historia extraviada!
en ti, mi voz se enreda
como en el peine los cabellos -
Otro día de ausencias
se desprenden de la agenda
la luz de los suspiros
agonizan en la garganta
y el tacto y el tacto solloza
en las sombras de las paredes.
En vano busco tu rostro
aun al final del arco iris.




Guillermina Covarrubias.
Agosto 2020

13 jul 2020

NOCHE TRAS NOCHE.




La fría noche está gris
y las gavillas de estrellas
se imprimen en el cielo.
El gotear de las metáforas
gravitantes aguijonean,
como pican los gorriones
las cerezas en verano.
El tiempo desanda su impaciencia,
sus horas parecen inmóviles;
zumban lentos los minutos
en el silencio misterioso,
y el hierro del verdugo
que me roba los abrazos.
Pero en los ojos; un remolino
desata destellos de esperanza,
gira para matizar colores
en los cerros y calzadas
los llanos y los bosques
y el cerezo de mi patio.
Mientras los sueños
duermen despoblados
en las hebillas de los zapatos.

Guillermina Covarrubias Medina
06/07/2020.

25 jun 2020

DE ESPIGAS Y DE OLVIDO



Corean las gotas de lluvia
y un arrullo de palomas
me galopa en las venas,
dibujan parábolas
desde las sienes al pecho;
me sacuden como flor al viento.
Y te pienso;
es tu aroma una huella
bordada en la piel
vigilando mi existencia.
Y te pienso;
aprieto la boca en los nudos
de mi equipaje, estas ahí,
tu mirada me quema
en ese café negro.
Y te pienso;
te visto de silencio
peinas mis cabellos
de espigas y de olvidos
y se despeña la noche.


Guillermina Covarrubias.

13 jun 2020

YA NO SÉ ESCRIBIR

Solo sé que nada sé
Sócrates




El café alumbrado duerme
en los días sensibles de lluvia
el alfabeto se ha escondido
en los huecos entre las paredes.
Un grillo apretado en la ventana
me arranca la flor
que se abre de noche,
cierra como un puño la memoria,
el lastre de mis dedos
no acarician tu distancia
y la pluma se olvida
de mis poros abiertos
de palabras vivientes;
solo sé, que tu nombre resuena
aún en el rumor de las campanas
¡y me pregunto y me respondo!
¡uno, no sabe nada!
y yo no sé escribir
las nubes grises ocultan las estrellas
las noches se han vuelto anónimas.
y en este minuto, con el vacío de las horas
espero florezcan amapolas
y se abran las jaulas de ventanas
de todos los rincones de la tierra.






Guillermina Covarrubias Medina
12/06/ 2020.
Sentada en mi rincón, las ausencias mojan mi ventana.
y pensé, a cuantos seres en el planeta les estará calando las ausencias.




Ven a mis sienes amado mío,
para que no muerda el alma;
el nacimiento de las espigas
y el silencio cosido a la lejanía-
no sea una vieja leyenda.
¿Qué puedo hacer sin trigo?
sin tu voz que mece el viento
en los ansiosos caminos
sembrados de azucenas,
que cubren mis nostalgias.
Ven a mis sienes amado mío,
que de hiedra se han cubierto
y colgó el olvido en mis alas
en la luna que oculta la noche.
En vano tengo coraza
el rocío alumbra mis ojos
cruza mi seno izquierdo,
se quebranta a las ausencias
en el ramaje de las venas
que aletean los amores
y no quiero enloquecer.


Guillermina Covarrubias.
25 de mayo 2020.

19 mar 2020

SE ACERCA EL OTOÑO (Décimas a marzo)



No sé qué pase mañana
cuando el sol de nuevo asome
mi tierra infértil arome
el sabor dulce a manzana.
Y cuando sea una anciana
mi higuera tal vez florezca
la luna también me ofrezca
jugar a las escondidas
con mis batallas zurcidas
el sueño siempre amanezca.


Así como el cóndor vuela
con mis alas de hojarasca
aunque pase una borrasca
y quede alguna secuela.
Los años son una escuela
son notas que silba el viento
así como el cóndor siento
su ancho y alto calibre
las horas del tiempo libre
sondeando los pensamientos


Tormentos de mis tormentos
los que el pensamiento acuna
y deja el alma en hambruna
con aquellos grises versos.
Si alguna vez fueron tersos
anidara en esa araña
el reflujo agrio que empaña.
Me calzo un poncho de luna
ninguna sombra ninguna
revotará en mi montaña.



Guillermina Covarrubias Medina
15 de marzo 2020

MI FIEL AMIGA,





Doy vuelta la llave
cruje el cerrojo
que abre los recuerdos
y busco tu gran figura
imponente soberbia
jugando con la luna.
Mastico el susurro
de tu boca viva
en mis oídos muertos.
Sibila, de versos proféticos
¡solo yo te escuchaba!
tan solo tu me oías,
los ladridos silentes
haciendo ovillos
cada noche el alma mía.
Y en las madrugadas
bella y fragante
me acicalabas
con tu verde cabellera.
Sin advertencia,
marzo te derribó
eras imponente y soberbia
como un ladrido
de madrugada
han pasado dos años
y me dejaste en la conciencia
que soy rompible perecedera,
humana, imperfecta;la simple, 
la Guille, te extraña y es cierto.




Guillermina Covarrubias.
18 de marzo 2020






Dedicado quien fue por muchos años mi alma gemela, mi HIGUERA

27 feb 2020

 DE MEMORIAS Y DE TIEMPOS ( A mi Facu)

Después tres meses enciendo mi viejo computador, mi compañero de aventuras y poesías, (no estaba muerto estaba taimado, a su dueña nomas.) brotaron todos los recuerdos de hace diez años y le escribí estas letras


 
 Estoy frente a ti,
desvelando la noche
con la lengua en tus rincones
busco el sentir
en las páginas perdidas.
Han pasado diez años
añorando los recuerdos,
de lunas y de olvidos
de amores y tristezas
de anhelos no cumplidos.
Te hablo, te siento y renazco
conjugando el verbo amar
en toda la razón
de mis pretéritos.
Dibujo tu figura
con mis dedos;
reboso a sorbos mi locura
en ese beso …
que tropezó en mi boca
y toda mi ternura hecha silencio.
Se hace abismo el olvido
que los años no han borrado,
te disperso mis versos en cascajos
para no morir en mi propia voz.
Sembraste palabras, sin ruidos,
gritos condenados al destierro,.
de tu mano vuelo sin alas
y se derrama la libertad
en la caja de pandora
de mis labios cerrados.

Te amo.

Guillermina Covarrubias Medina
27 / 02/ 2020

16 feb 2020

AMANECIDA







Un ladrido de madrugada despierta en oleaje el vuelo de los pájaros, perverso silencio; que me habla y pone en vitrina las secuelas de la piel y del alma.
Y los pensamientos también huyen de la quietud de mis manos que intenta apaciguarlos y prensar el fardo gris que detona como una bomba atómica,ahí donde morí mil veces y mil veces volví a vivir. Sentí la culpa de no ser perfecta para un ser perfecto, entonces se marchitaron las margaritas de la boca, duelen los recuerdos más que los leñazos del tiempo.
Apego mi cabeza al cristal, desanda a los dibujos morados, las membranas me exigen respuestas; se contrae mi boca y la mañana huele a esa verdad que amartillo.
Una y cien veces crucé el mar rojo, di vueltas esas mismas veces en círculo, quise beber del becerro de oro y en conclusiva siempre regresé por cebollas a Egipto.
La oscuridad fatiga, hace agujeros muy hondos que no hay espuma que los tape…. Las noches siempre serán noches, pero la claridad no es efímera, y el amanecer nunca se tarda…
Entonces gire el timón, y cambio el rumbo a mar abierto... ya no quiero volver a Ítaca.

Guillermina Covarrubias Medina
Febrero 2020

10 feb 2020

CARTA EN UNA BOTELLA

Para Antología Cartas de amor.





Amado mío, esta carta puede no llegar nunca a tus manos. Al escribirla puse toda el alma; quizás el mar se la lleve, o, tal vez, quede ancladas en alguna playa lejana, o la lea un enamorado e imagine que es de su amada. Amor mío te soñaba sin rostro en mi almohada; te inventé para hacer más liviana mi cama, y así te convertiste en el beso susurrante que la luna canta, que el sol canta. Así cuando era feliz en mi escuelita encumbrada, pintando en cuadernos las rosas tempranas, ya estabas.
Y no tiene que ser un día especial para decirle que mi corazón empezó a latir de una forma diferente desde aquel día que supe que usted es un ser mágico, maravilloso, que me enreda, me pone disléxica, que hace temblar mi mundo- mi corazón se sube a la garganta- entonces me olvido de todo vuelvo a ser chiquilla. Usted me hace soñar, me hace reír, también llorar, pero las lágrimas de amor no duelen, porque entendí que mi única verdad es este amor que me impulsa a seguir; no pida razones, no tengo explicación: simplemente me enamoré de usted porque cambió mi historia. Mi corazón vive porque le sueña, su amor dibuja margaritas en mi cara. Gracias por enseñarme esta tan personal manera de amar, mas en mis planes no estaba amarle. Lidie, puse barreras y muros contra eso, mas se me hizo imposible no amarle. Entonces me rendí y opte por dejar que todo fluya: le hice mi aire, mi luz, mis estrellas y mi sol. Aún me emociona al recordar lo que significa en mi vida, no puedo acariciarlo, ni siquiera besarle, pero esa sensación es la me nutre el alma, desde entonces he vivido con usted en mis sueños locos. Esa tarde dorada como la miel, en que aquellos besos se quedaron pegados a mi boca permanecerán en mis cabellos, ahora ya de plata. Cada perla que brota mis ojos, perlas sí, son perlas porque son de amor anónimas; qué sabe nadie lo que mi corazón calla. Te amé sin rostro en mis noches heladas, te amé en mis madrugadas con tu rostro en mi frente y en el alma. Hoy te amo en mis versos. Más que ayer eres mío en mi alabanza; eres mío en mi buenaventura. En mi boca las palabras, en mi boca la plegaria. En cada alegría mi amor, te doy las gracias, pues tu vida es tan linda y brilla como el lucero de la mañana.
Amado mío el tiempo pasa, la sed sigue en mi garganta, no me pidas que te olvide, sería matar el alma.
Mi bien amado anónimo mío.
Siempre tuya…
Guillermina Covarrubias.
Febrero 2013

11 ene 2020

INVISIBLE



A veces cuesta tanto arrancar o simplemente gritar desde un balcón lo que se lleva en la joroba, sin embargo escribir limpia los dientes esos que muerden los dragones y se guardan en el buche mientras la noche remece la garganta con sus guantes de hielo que van sobando los paganos pechos, y los cisnes de cuello negro se entrelazan y se meten en la piel como una poesía de Baudelaire, jugando a los silenciosos paradigmas en la soledad indecible, con la tela del cuadro agujereado de la mujer desnuda junto a la fuente esperando el superracionalismo y la metafísica que irradian el canto de los pájaros y en la imaginación que camina inevitable entre fábulas, sin ruidos en un mundo real que neutraliza mis sueños.


Guillermina Covarrubias Medina
Enero 2020
Dragones = miedos.

ZUMBIDOS



Me desvela un café
melancólico, desde las hebras
hasta las pestañas;
se desliza al ritmo de un jazz
intentando desafiar lo imposible.
El silencio sumiso me traga
como las piedras en el agua
y el gris brumoso de las nubes
cabalga sobre nadie; sobre nada.
Mi pelo blanco se multiplica
y las últimas membranas
trastabilla en los sorbos
de la redondez del tiempo.
Una turba desollada
azuzan, relinchan
las bolsas de suburbios
escarbando las historias,
que me miran de reojo
entre las copas llenas
de los esquineros vacíos.


Guillermina Covarrubias Medina
Enero 2020