Te cantaron con el vino
dorados ramos de trigos
que adornaron tus abrigos
en lo humano en lo divino/.
Cual pajarillo y su trino
te despidieron con cantos
arpa y guitarrón con llantos
los mantos también tejidos,
quedaran por siempre ungidos
con las dichas y quebrantos.
Le cantó a las diferencias
y a run run se fue pal norte
puso en la tonada su porte
marcando las deficiencias
de su pueblo las carencias/
Y en versos el desengaño
de aquel gavilán tacaño
que desgarró su querer/
Y en el culto anochecer
la hiel tejía en su paño.
Ay ay mi Viole Parra
y fue un cinco de febrero
la noticia fue un reguero
dejó su voz la cigarra,
apoyada en su guitarra
le brota sangre en la mano/
Cómo se cuenta al hermano
esas heridas muy viejas/
cuando se bordan las quejas
y el corazón no está llano.
Guillermina Covarrubias Medina
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