Los días y otros días

 

                

La utopía ruge como el viento

con el pícaro cantar de las golondrinas

ahí donde el árbol más alto germina

oigo tu voz frente al susurro

los días y otros días.

Son ráfagas el centenar de arrullos

que sonríen y lloran

los días y otros días.

¿Será que siembro fantasmas?

de letras despeinadas

donde se acurruca la pena

en la falda de los cerros

los días y otros días.

La ausencia y la lejanía

son caminos de silencios

y en la cuna de los vientos

en el lenguaje nocturno

te busco.

Ya la luna bosteza

yo necesito tu voz

para que me toque y florezca

la sonrisa del alba

los días y otros días.

Guillermina Covarrubias Medina

24 de abril de 2023

AMAPOLAS

Mi boca blasfema la triste dulzura,

de piedra se ha vuelto mi pecho

tantas cenizas en el corazón;

un mundo de sentimientos en el cuerpo.

La aurora perfuma las heridas

se vuelven de metal mis manos,

¡y no quiero!

Se han llenado de polvos mis zapatos,

pretendiendo alcanzar el viento

con una alforja llena de palomas y sueños.

 ¡Ay efímeros sueños!

sombras que se diluyen a fuego lento,

pero siempre el río vuelve al mar

bebiendo el zumo de su sal

que deja el sabor de lo incierto;

la armadura de lana del amigo

la levadura de la luz y tinieblas

que amasan su pan de noche.

¡Ay si hasta escucho los quejidos!

de los árboles y los aullidos

lastimeros de mi hija perruna

como anunciando el destierro.

¡A veces tampoco quiero

arrumbar mis otras semillas

en el cóncavo y convexo.

Debo regresar al Génesis

a las raíces de mi huerto

¡Ahí me esperan otras amapolas!

Guillermina Covarrubias Medina.

Febrero de 2023

DIOSA HIGUERA MÍA.

Si estuvieras higuera amiga

que cosas te contaría,

de lo viejo y de lo mozo

de estrellas y telarañas

y del lado falso de la luna. 

 

Sigo rumiando tu ausencia

con la sangre Peregrina,

entre lo cierto y lo fingido,

un suspiro cruje en el pecho

y en la frágil sapiencia.

Ay, vieja y misteriosa amiga!

en el recuerdo dulce brotas,

imponente tras mi ventana

con la luna entre tus ramas

jugando a las escondidas.

Eras mi diosa discreta

te llevaste entre tus ranuras,

esa sed interna y mis fantasmas

la yegua de volar ligero,

por el horizonte contrario.

En vano, necia te busco

como espiga en rastrojo

en el destierro que hiela,

con el vientre dividido

y nave de timón roto

Guillermina Covarrubias Medina.

Abril 2023.

CARTA EN LA BOTELLA