9 abr 2013

MI ESPEJO Y YO


Un día que ni cuándo ni dónde
había perdido algo mío
la causante de mi soledad
¿Dónde había dejado mi alma?
en las llanuras áridas
en el insistente llamado del sueño
en una huella honda
en esos ojos que no eran míos
cansada de mi silueta rebelde
como aquel payaso perdido
que no sabe cuál papel hacer.
¡Dejaste tu alma ¡
anulaste tu voluntad y conciencia
tus pupilas navegaron a la deriva
cobarde escupes la vida
toma tu fardo de recuerdos
tormento de amor egoísta
Llora llora tu pena
aún hueles a limpia
si alguien fuera ser eterno
tienes demasiada imaginación
entonces toma tu pluma
y cántale a la vida.

Guillermina Covarrubias Medina


2 comentarios:

  1. Aunque algo enigmática, la poeta parece lamentar haber perdido alguna perla.

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  2. Fernando muchas gracias, amigo mio uffff me alegra tu comentario.

    un abrazo

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