28 ago 2021



ONCE SILENCIOS



Soy Guille, y tú, te llamas poesía,
dibujas luz como la intensa aurora;
eres silencio en la pluma sonora,
un beso que cobija el alma mía.
Once silencios profanan las
entrañas, tus ojos pequeños,
aun clavados a mi almohada,
abro los brazos en las huellas
infinitas, renaciendo cada
madrugada.
Donde yacen los besos de ceniza,
desprendiendo en cadena la
negrura, perfora la tumba oscura,
así el viento en una hamaca,
escapando por alguna fisura.
En los trigales la brisa zumba
entre la impaciente pluma
desmedida, alborota los cabellos,
se desliza, y el corazón zurce las mil
letras, en los harapos que rasguñan
las pestañas.
Se desvela el hambre en la ventana,
camina en la senda de antaño,
la noche en un solo vuelo,
cala mi rostro, de espantapájaros,
con sus agostos arrebolados.
El costado izquierdo brama,
brincan los once silencios
y se ovillan en multitud,
enredando las nostalgias.


Guillermina Covarrubias Medina